Aromaterapia Egipcia
En Egipto el uso de aceites perfumados e inciensos ha sido conocido y desarrollado desde tiempos históricos inmemoriales. En Saqqara se han descubierto dos tumbas del imperio antiguo (aprox. 2.300 A.c.) donde se han encontrado tablillas de ofrendas de alabastro para los siete aceites sagrados. En las tablillas aparecen los nombres escritos en lenguaje jeroglífico de los siete aceites sagrados sobre cada uno de los siete receptáculos habilitados para contener los siete aceites sagrados.
Estos siete aceites también se mencionan en los listados de ofrendas de la primera dinastía (3.000 A.c. aprox.), en los Textos de las Pirámides y aparecen reflejados en documentos históricos y literarios de otras culturas antiguas.
Los siete aceites sagrados los usaban diariamente los sacerdotes y sacerdotisas en el culto a los dioses para ungir las estatuas, así como también en la momificación y en la ceremonia de apertura de la boca del difunto. Los médicos los usaban como sus medicamentos para la curación de la enfermedad. En este sentido también se han encontrado las tablillas de ofrendas en las tumbas de los médicos. Pero el conocimiento de los siete aceites sagrados en el Antiguo Egipto, alcanzaba el acceso a profundos misterios espirituales, por ejemplo, el efecto sobre los siete chacras físicos.
Además de los siete aceites sagrados para los siete chacras físicos, existen siete aceites sagrados para los siete chacras áureos o etéricos, localizados en el aura de los seres e interdependientes de los siete chacras físicos.
Los aceites sagrados son elaborados en Egipto mediante un antiguo método alquímico de extracción del aceite esencial de la planta a través de un aceite base portador que captura la molécula del aceite esencial para evitar la evaporación de éste, ya que los aceites esenciales se caracterizan por ser de volatibilidad inmediata.
Desde diferentes fuentes provenientes del Antiguo Egipto, nos llegan nombre y usos de estos siete aceites sagrados. Sabemos que su uso por parte de los sacerdotes se relacionaba con el nivel iniciático que el sacerdote había alcanzado.
Cada aceite con sus propiedades físicas, psíquicas, emocionales y espirituales, son un tesoro para potenciar cualquier terapia. El hombre conectado a la naturaleza y a los Guardianes que cuidan y protegen el orden del universo espiritual del entorno, escucha los antiguos secretos de los antepasados Egipcios. Es posible emplear la alquimia y extraer la medicina de las flores a través del aceite esencial, que es sagrado por sus propiedades curativas, y activado por todos los factores naturales que rodean el nacimiento de esa flor.